Los trastornos depresivos se encuentran entre las enfermedades más frecuentes y discapacitantes en la actualidad.
Su incidencia ha aumentado significativamente en las últimas décadas debido a múltiples factores ambientales, sociales y biológicos. La búsqueda de nuevas alternativas farmacológicas para tratar la depresión se erige en una prioridad.
En la investigación existen estudios sobre determinadas herramientas no farmacológicas que nos pueden ayudar y asistir en el tratamiento de estos pacientes como la estimulación magnética transcraneal, por ejemplo.
Diferentes alteraciones en las concentraciones plasmáticas de los aminoácidos son también característicos en la depresión así como nos pueden ayudar a determinar si un paciente puede ser resistente o no al tratamiento depresivo.
También determinados suplementos nutraceúticos con propiedades prometedoras similares a las de los antidepresivos actuarían a través de varios mecanismos de acción incluido el paso a través de la barrera hematoencefálica y la participación del sistema serotoninérgico y factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF).
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