El colesterol no sólo se deposita en las arterias.
Sobre todo en determinados casos de hipercolesterolemia genética puede depositarse en los tendones, más concretamente en tendón de Aquiles, aunque también en tendones extensores de las manos e en la cornea determinando el denominado anillo corneal.
En casos menos evidentes no se evidencia este depósito de forma externa pero se manifiesta con dolores periódicos o tendinopatia aquilea.
Referir también con la triada y la relación existente entre alteraciones funcionales del higado- tendinopatias-colesterol.
Dr Cruz Velarde
Neurólogo
www.neuronae.net
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