Son conocidas las múltiples propiedades de determinados extractos herbales para el tratamiento de diferentes síntomas. Hay innumerables preparados que pueden ser beneficiosos, pero conviene consultar con su médico la idoneidad de los mismos para cada paciente en particular, ya que lejos de la impresión general, puede conllevar importantes efectos secundarios si se toman de forma continuada y sin control.
Desde problemas de coagulación con derivados de cartilago de tiburón, interacción con niveles sanguineos de diferentes fármacos como sucede con el hiperico, o problemas serios como alteraciones de la sustancia blanca cerebral con equinacea
Con base en lo anterior puede concluirse que la fitomedicina está lejos de ser inocua y podría ser tan eficaz y peligrosa como la medicina alopática. En tal sentido la opinión de los autores es que en nuestro medio los extractos herbales deberían ser sometidos a estudios tan rigurosos como los medicamentos, siguiendo el método científico tal y como ocurre en países tan desarrollados como Alemania y Francia. Así las cosas, también deberían someterse a la normativa que controla el estudio, indicaciones y prescripción de los mismos.
Dr Juan A Cruz Velarde
Neurólogo Neuronae